Un hijo… Un hijo es lo más grande que hay en la vida. Cuando es pequeño, evitas que se suba a lo alto del tobogán. Pero cuando crece, uno ya no ve el tobogán y en cualquier momento puede ocurrir lo peor… que haga algo tremendo, y aun así, no dejará de ser tu hijo. Es algo que nunca cambia, haga lo que haga. Un hijo nunca deja de ser un hijo.
Puedes enseñarle a tu hijo que subirse a lo alto del tobogán es peligroso, porque puede hacerse daño. Pero el día que te das la vuelta, y se cae, y se deja los dientes… Te das cuenta de que por mucho que llore, el golpe no le duele ni la millonésima parte de lo que te va a doler a ti.
No hay comentarios:
Publicar un comentario